¿QUIÉN, YO?



Graciela Lecube-Chavez

 
©   2012

 
En la calle de mi casa alguien abrió un pozo  
y para verlo de cerca corrí hasta él como loco.

Un policía me siguió sin saber por qué y adónde
 yo corría, seguro de pescarme en una fechorría.

Ansioso de enterarme qué ocultaba aquel hueco
no me importó su presencia ni la de otros tampoco.

Llegué con la lengua afuera, sudado y tembloroso.
¿Qué iba a descubrir ocultándose en el vacío peligroso?

¿Un cocodrilo o los restos de un cuerpo por él mordido?
¿una bolsa repleta de billetes abandonada por un bandido?

Empezó a llover y en un ratito todo quedó mojado;
 “Cuidado, muchacho”, oí gritar y no me dí por aludido.

Pero me detuve igual y al voltearme como desentendido,
vi al policía darle una boleta a un jovencito en bicicleta.


Comentarios