Graciela Lecube-Chavez
© 2012
© 2012
Illustración de Pablo Bernasconi
Papel y lápiz en mano me tiro
bajo la fronda de un árbol nuevo
que si me da lo que espero
prometo comer a diario un huevo.
Una cosa no tiene nada que ver
con la otra, pero es apropiado
hacer una promesa crecer
para complacer al aficionado.
Inventar algo que no existe
trae admiración y fortuna,
y yo quiero ser el que insiste
aún sin tener idea alguna.
Quisiera que mi invento
no fuera ni grande ni caro
ni pesado, sino un portento
usable, simple y no raro.
Yo sé que estoy metido
en un proyecto ambicioso,
que aunque me tiene afligido
intento salir de él airoso.
Las ganas no me faltan,
la ambición tampoco,
y si las sumas no apuntan
confío en mi suerte de loco.
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