Graciela Lecube-Chavez
© 2011
El lunes la lengua me mordí
comiendo una galleta de maní.
El martes la lengua me mordí
comiendo pollo guisado con ají.
El miércoles la lengua me mordí
comiendo la pizza que pedí.
El jueves la lengua me mordí
comiendo ensalada con ajonjolí.
El viernes la lengua me mordí
comiendo corbina del país.
El sábado y el domingo
un descanso a la lengua dí,
pero después de pensarlo
un rato, ¡me arrepentí!
Comentarios