Ironías del Mundo Animal

Azael Alberto Vigil

© 2009

Le pregunta el mono al león, interesadamente:
-A propósito, ¿donde puedo comprar una barba grande, grande como la tuya?-

-¿Y tú?-pregunta la yegua a la cebra-¿Dónde compraste esa pijama rayadita? Yo quiero una para mi cumpleaños.-

Luego le dice la sardina al tiburón:
-¡Oye! ¿Vas al gimnasio?-

Al mismo tiempo que le pregunta el bacalao a la piraña:
-¿Y tú... te lavas los dientes o te los afilas? No te enojes, pero los tienes blanquitos y puntiagudos. ¡Qué envidia!-

El ratón trata de convencer al gato:
-Esta pelea entre tú y yo es injusta. ¡Abusador! ¿Por qué te metes con los más chicos? A mí ni me gusta el queso...No fui yo, fue mi primo Spidy-

Y el periquito le pregunta al perro:
-¿Te gustaría aprender hablar como yo?-
El perro enojado contesta:
-¿Tanto como tú...No...? Mejor menos...-

La liebre le dice a la tortuga, muy seria:
-Cambio mi velocidad por tu carapacho. ¿Qué dices?
La tortuga sonríe y contesta:
-Yo voy por la vida sin prisa. Además, sería indecente quedarme desnuda.-

En la oscuridad, le dice el búho, un poco molesto, a la luciérnaga:
-¡Apaga la luz que no veo!-

Y le pregunta el camello, sudado y cansado, al delfín:
-¿A ti te da sed?

La iguana cuestiona desesperadamente al cocodrilo:
-¿Oye?... ¿Cuántos años me faltan para llegar a estar cómo tú... de grande?-

Le dice el sapo al lagarto:
-Hoy, me preguntaron por un animal verde, feo y bocón...Yo lo único que hice fue pensar en ti mi respetado amigo.-

Al final, le dice la culebra a chita:
-te doy una banana si bailas una cumbia.-
Chita ofendida le responde:
-Yo te doy un racimo de plátanos si te desapareces. ¡Qué no ves que yo sólo bailo tango!-