Graciela Lecube Chavez
© 2017
Julia, mi hermana mayor,
acaba de cumplir los 20 y yo
soy su ferviente admirador.
Ella se propuso cuidar su
alimentación para mantener
un peso estable y cumple
con los debidos requisitos
de manera admirable.
Para comenzar visitó
a una reconocida dietista
que le recomendó la lectura
de varios libros sobre el tema,
que tomara notas y las repasara
por ser parte del sistema.
Adoptar sin pruebas extremas
ciertas mejorías establecidas
como elegir cantidades menores
de comida (especialmente la que
más nos gusta), nunca comer
de prisa y nunca dejar un bocado
dentro de la boca mientras viene
otro en camino. Es decir, darle
a cada bocado el tiempo
que se merece para que aporte
a la salud mientras se crece.
Mi hermana respeta las promesas
que a si misma se hace. Yo la observo,
la admiro y la imito, agradecido
de tenerla de modelo. Ella me inspira
a comer saludable y sabroso con menos
carne, azúcar, grasa y frituras pero
con más frutas y vegetales.
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