Graciela
Lecube Chavez
©
2017
Adiós,
cara de arroz,
cada
vez que te miro
siento
un miedo atroz.
Quiero
darte un saludo
pero
al abrir la boca
sale
tremendo estornudo.
Nos
veremos después,
si
hasta entonces
no
me como esta nuez.
Ten
un viaje placentero,
no
comas todo lo que ves
y
regresa todo entero.
Mi
tía se fue de vacaciones
y
de despistada olvidó
empacar todos sus calzones.
Comentarios