LA GRAN CELEBRACIÓN

-Graciela Lecube-Chavez-
Derechos reservados (Copyright 2008)


Las calles se llenan de luces
y las vitrinas de juguetes y dulces.
La gente se detiene a admirar
con intención de entrar y comprar.
Hay miradas de amor, de alegría,
y planes para disfrutar cada día.
El deseo de compartir y agradecer,
disfrutar y regalar es el mismo
en Hanukkah, Kwanzaa y Navidad,
entre judíos, negros y cristianos.

El cielo de la paz y la abundancia
no es sólo para mí y los míos,
porque el Dios que todo lo sabe
reparte sus bienes por partes iguales.

Cada año, otro año se nos va ligerito
seguido de otro con muchas promesas.
Ansiosos de renovación, nos entregamos
con total abandono y sin consideración.

El primero de tal o cual año
volvemos a empezar, haciendo promesas
sin darnos cuenta que no vamos a cumplir
porque entre gozar, sufrir y mentir
a nosotros mismos nos hacemos daño
y sin proponerlo volvemos a repetir
lo que nos propusimos corregir.

Sin pensar si somos judíos, negros
o cristianos, en las fiestas anuales
de Hanukkah, Kwanzaa y Navidad,
regalemos amor, paz y unidad
porque debajo de la bóveda celestial
todos somos hermanos.

Comentarios

Anónimo dijo…
este poemon es bien chevere porque nos junta a todos como manda dios, si Señor. esto si que voy a copiar y guardar en mi bolso porque no quiero que se me pierda.
Anónimo dijo…
Este poema esta lindisimo y de inmediato nos hace reconocer que para celebrar una fiesta tradicional en nuestras vidas, debemos hacerlo siempre unidos, bien sea espiritual o personalmente,con fe, anor, y una oracion para estar celebrando la UNIDAD humana. LMG.